martes, 22 de julio de 2008

MONTAG


-Ni en sueños, de eso nada-
-No montes un numerito sabías que este día acabaría llegando-
-Para ti es muy fácil decirlo, ¿sabes lo que duele?-
-No,yo no siento dolor-
- Claro así cualquiera...¿Has visto el tamaño que tiene?¿Lo has visto?-
-No es tan grande, te cabe perfectamente-
-Pff perfectamente!, perfectamente!, si debe medir casi medio metro-
-Según mis datos son 203 milímetros. Se razonable no tienes más remedio que metértela-
-A ver, respóndeme con sinceridad por favor ,¿que pasaría si no me la inyecto?-
-Te explotaría la cabeza-
-Va no exageres, sólo lo dices para meterme miedo, por la cuenta que te trae-
-Mira si en 2 horas no te has inyectado el refrigerante me sobrecalentaré-
-Vale pero eso no significa que me vaya a estallar la cabeza-
-Por favor déjame terminar-Le rogó Dnomo-Primero me sobrecalentaré...empezarás a notar un pinchazo en la sien justo donde me llevas instalado.A los cindo minutos te arderá el ojo derecho, será algo parecido a un fuerte picor sólo que acabará derritiéndose . Pasados diez minutos, cuando el fallo de refrigeración sea completo, todos mis circuitos llegarán a los 300 grados y como estoy instalado en el interior de tu cráneo...-
-Que... que pasará...?-
-Pues que te freiré el cerebro y los dos dejaremos de existir.-
Freddy lanzó un suspiro de resignación y echó una mirada de reojo a la aguja de aquel chisme.Con el dedo índice palpó el orificio metálico de un milímetro de ancho que nacía tras su oreja derecha.
”¿Por qué diablos me habré instalado en la cabeza esta unidad de información?”Pensó.
-Porque un mercader espacial sería incapaz de realizar los cálculos de vuelo el solito, además Freddy, entre tu y yo,reconoce que eres un desastre.-Le recriminó Dnomo.
-¿No me puedes dejar en paz ni cuando pienso?-
-Sólo tienes que pasar a comunicación verbal.-
-Modo hablado-Dijo Freddy en voz alta.-

Volvió a mirar la inyección y la tomó con una mano.
-De acuerdo dime que más tengo que hacer-.
-Busca algo de ropa y muérdela-
-¿Que?Te estás riendo de mí, me tomas por idiota?-
-Cuando acabes de inyectar el refrigerante me reiniciaré-
-Y?-
-Pues que todo tu sistema nervioso central también se reiniciará ¿entiendes?Apretarás la mandíbula con tanta que fuerza que te partirás los dientes.-
Antes de que hubiera acabado la frase un calcetín arrugado y maloliente ya colgaba de la boca de Freddy.
-Qwuew mashw?-Intentó pronunciar éste.
-Sólo relájate y ponte cómodo-Le contestó Dnomo con su tono de voz más calmado.
Freddy encaró la aguja con el orificio metálico.La jeringuilla le traspasó por el conducto hasta llegar a su sien.El nuevo refrigerante ya estaba en su sitio. El usado se expulsó un segundo después, un liquido negro y grumoso rellenó la inyección. Freddy la extrajo tirándola con furia por la ventanilla, preparándose para lo peor. Reclinó el asiento del conductor hacia atrás cerrando los ojos.Respiró hondo.Aguardó un minuto.No pasaba nada.¿Y si le estaban tomando el pelo?.”nooooooo.”Parecía decirle el zumbido que empezaba a latir en su sien derecha.
-Me duele, mierda, me duele-Gritaba Freddy sintiendo que le habían metido una moulinex en la cabeza.Abrió los ojos para ver como líneas de código corrían en horizontal allá donde mirara.
Rayos eléctricos le atravesaban la columna desde la base del cráneo.Las piernas le empezaron a temblar...finalmente perdió el sentido.
-Buenos días bella durmiente-Le susurró Dnomo.
-Que pasa? ¿Donde estamos?-Se desperezó Freddy.
-En Montag, venimos a traer unos pedidos, es a lo que te dedicas, ¿recuerdas?-
-Montag?Pedidos? Cuanto tiempo he dormido desde el reinicio?-
-Un minuto y cinco segundos-Le respondió con la exactitud de un reloj suizo.
-Un minuto...-Dijo Freddy rascándose la cabeza.-¿Cuantas entregas hay?-
-Diecisiete, corrijo dieseis, una de ellas fue anulada en los primeros doce meses de viaje es decir hace 23 años -
-¿Como que anulada?-
Freddy Conectó el panel multifunción del vehículo que después de unos parpadeos vergonzosos logró encenderse.Empezó a revisar los pedidos, su lugar de entrega y se concentró en la linea roja que subrayaba el encargo anulado.
-¿Por qué ?-
-Parece ser que alguien se nos ha adelantado, alguien de la competencia-
-No me digas que ha sido Prius por favor,-
-El portador ha sido...-Dnomo no pudo continuar, se quedó callado.Redoble de tambores.-John Spencer Prius.Vaya,Lo siento Fred.-
-No tranquilo si no pasa nada...-Dijo Freddy mientras aplastaba una lata de cerveza haciéndose un corte en la mano.
-Pero que haces,quieres matarnos?-Le dijo Dnomo cuyos sensores físicos, enraizados en el cerebro de Freddy habían cuantificado el daño corporal.
-Matar...matar que dulce palabra-Susurró.
-Pero que dices! él es tu compatriota, los dos soys hijos de Vieja tierra-Le recriminó Dnomo.
-No tiene nada que ver! Y deja de llamarla vieja tierra es LA TIERRA, el mejor lugar del universo-Gritó Freddy-Cuando aterrizó ese hijo de puta en Montag?-.
-Pues llegó con una diferencia de mas menos 17 parsecs de ventaja, según mis cálculos llevábamos un año y 10 meses de viaje a velocidad luz-Le respondió Dnomo casi esperando que su interlocutor tomara apuntes.
-Dnomo...-Intentó interrumpir.
-Bueno los 17 parsecs son solo una estimación, si tenemos en cuenta la desviación que se produce al pasar cerca de Centauri Alpha...-Continuaba embriagado de conocimientos.
-Dnomo en cristiano, hazme el favor!-Gritó Freddy .
-Prius llegó hace 60 años -
-¿Cual era la mercancía?-Continuó interrogando.
-La información no se puede consultar parece que es confidencial, en la etiqueta sólo hay escrito una palabra.-
-Cual?-
-Arcadia-
-Arcadia.... ¿que coño es eso?-
-Mi sistema no puede desbloquear la barrera de seguridad-Comentó Dnomo que iba trabajando por libre.
-No se...me suena de algo, aunque no recuerdo bien...de todas formas me la suda-Añadió Freddy mientras lanzaba un escupitajo por la ventanilla casi tan denso como el pavimento.-Cual es el siguiente encargo?-
-Unas semillas transgénicas tipo Star-fruit, hay que llevarlas a la 123 dx-Le explicó Dnomo.
Freddy activó el GPS.Un plano de la ciudad apareció en el panel: cientos de calles ordenadas en una cuadrícula perfecta.La luz roja parpadeaba sobre el destino, para alcanzarlo debían seguir los pasos que iba indicando una flecha verde que marcaba la dirección a tomar en cada intersección.
“En el siguiente cruce gire a la izquierda”, “Continue recto hasta tomar la próxima a la derecha”,
“Avance cien metros por la avenida principal, luego tome la segunda y a la izquierda”.
La voz del navegador iba tatareando la sinfonía del aburrimiento.El coche avanzó por una avenida, después deshizo un nudo de callejuelas antiguas, más adelante empequeñeció en el centro de una autopista de diez carriles, sin darse cuenta hacía de machete entre la maleza de una estrecha carretera infectada de ramas de árbol.
-¿Que es lo que pasa aquí?-preguntó Freddy.
-¿Te vuelve a fallar la memoria?-respondió Dnomo.
-No idiota, me refiero a la ciudad, que pasa con esta ciudad?-
-¿Que quieres decir?-
-Fíjate bien, cuanto tiempo ha pasado desde que aterrizamos en el planeta?-
-Tres horas,doce minutos y cincuenta y seis segundos-
-Bien y cuanto tiempo llevamos dando vueltas?-Continuó preguntando Freddy.
-Treinta y dos minutos con cuarenta segundos, exactamente-Le contestó con orgullo Dnomo.
-Y ahora intenta averiguar a cuantas personas hemos visto desde entonces-
Dnomo puso en marcha su chip de cálculo a máxima potencia.Los acertijos matemáticos le excitaban.Se estimuló con un par de ecuaciones, fregó su sensor del placer con varias integrales avanzadas,penetró sucesivamente en X Y y Z,finalmente consiguió eyacular el resultado:
-Cero Fred, no hemos visto a nadie desde que llegamos, es muy extraño, es ilógico-Se alarmó Dnomo.
-¿Ilógico?-Preguntó Freddy exigiéndole una aclaración con la mirada.
-Mis datos me dicen que en la ciudad viven cuatrocientos cincuenta y un millones,es imposible que no hayamos visto a nadie aún!Imposible del todo!-
-Busca posibilidades fuera de la lógica-
-Claro y luego me vendrán ganas de tomarme una birra y pegarme la siesta, no?-
-Eso sería pedir demasiado a un trozo de silicio no crees?-Apuntó Freddy con una sonrisa sarcástica.
-Hazme un favor: evoluciona-Zanjó Dnomo.
Durante el resto del trayecto ambos concentraron todas sus fuerzas en buscar. Freddy miraba a su alrededor, se esforzaba por ver una silueta humana a través de la ventana de un edificio, incluso en ocasiones tenía la sensación de que un coche aparcado a lo lejos empezaba a desplazarse, pero nunca obtenía más que ilusiones.Dnomo por su parte diseccionaba los datos visuales que le proporcionaba su huésped, se concentraba en las imágenes procurando repasarlas luego en cámara lenta, ampliando aquella sombra que a lo lejos le parecía humana, diseccionando los pixels con el bisturí lógico que siempre empuñaba,pero nunca obtenía más que errores.
Casi sin darse cuenta llegaron a su destino.El domicilio estaba en la zona comercial. Cuatro edificios-panel de cien pisos de alto rodeaban una plaza cuadrada. La cara frontal de cada uno de ellos servían de pantalla bidimensional repitiendo siempre las mismas imágenes sincronizadas:
En primer lugar un señor canoso, arreglado y encorbatado salía en el plano.Parecía explayarse con aires de suficiencia , derrochando gestos y muecas para luego ,al mutar en una sonrisa prefabricada, desaparecer en el fundido a negro de la pantalla. Sin tiempo para coger aire la cámara inmortalizaba la belleza de un playa virgen, escoltada por una linea de palmeras que se torcían en un intento eterno por tocar el cielo.
El sol quemaba sobre la arena, a lo lejos una pareja se perseguía chapoteando en las olas, huyendo el uno del otro, abrazándose, atrapándose y huyendo de nuevo, jugando sin saberlo al juego del amor ,rebozándose de arena, saliva y besos.
Con la visión de la playa aún impresa en la retina de Freddy, la pantalla enfocaba a una señora entrando en una inmensa joyería, una preciosa jaula de oro, plata y diamantes.La dama se probaba una gargantilla salpicada de zafiros mientras engrilletaba su muñeca a una pulsera sarpullida de rubíes azules.El precio de todas aquellas maravillas siempre en blanco.
Sin espacio para digerirlo, la cámara retrataba a un galán , un gentelman , la definición de ganador del diccionario, en el centro de una fiesta. Rodeado por decenas de mujeres, halagado por sus camaradas, alimentando su alma de una copa de champán tras otra, intoxicado por las risas que nacían de sus ocurrencias,elevado por cien manos que le arrojaban a la piscina en donde las sirenas querían oír sus cantos.
Con el corazón aún palpitante por la emoción ,sintiendo que el éxtasis se endurecía en sus pantalones ,Freddy leyó en la pantalla: “VISITA ARCADIA, SUMERGETE EN EL PLACER”.
-Que...que cojones...que cojones es Arcadia?!-Preguntó Freddy aún absorto en las imágenes que se reproducían en un bucle sin fin. -Dnomo búscalo en tus fuentes, inicia una búsqueda completa si hace falta-Continuó
-Completa?Puede llevar mucho tiempo...no digo que sea imposible pero...-Se justificaba.
-No me importa, búscalo-
Pese a todo continuaron con su encargo.Entraron en el edificio.Un olor a macarrones de hace diez días sacados de un tupper de plástico orinado por un gato les dio la bienvenida.
-Diossss....-Se lamentó Freddy con una mueca de genuino asco-¿Quien se ha muerto aquí?-Ironizó.
Durante su ascenso hasta la planta diez esperó que alguna mirilla parpadeara para chafardear al extranjero con ropas terrícolas que les invadía. Quizá no le hubiera sorprendido darse de bruces
con un diablillo de cinco años que jugase en el rellano de su casa.Una vez en la último piso, frente
a la puerta de su cliente sólo le invadía una certeza: no había nadie en aquel edificio.
-Estas seguro de eso?-Le preguntó Dnomo al verle entornar el pomo de la puerta.
-Cuatro años luz, ciento cinco de tiempo real tirados a la basura, surcando el espacio en esa lata de sardinas-Le fulminó Freddy mientras acababa de abrir.
-“Adelante, adelante pasad”-
Le dijeron diez tuppers de macarrones caducados orinados por un gato. Freddy contuvo una arcada con la mano.Levantó la mirada para ver como al fondo del pasillo una persona reposaba de espaldas en una butaca negra.En la cabeza vestía un extraño casco de color fucsia.
Una llama de esperanza se encendió en su pecho.
-Err...hola?...perdona que me cuele así en tu casa...es que bueno la puerta ya sabes..la has dejado abierta y claro...tengo muchos más encargos...eso que dicen que el tiempo es oro no?-Dijo rebuscando las silabas en su paladar.- Traigo las semillas de Star fruit...vienen directas desde la tierra...”ya era hora” deberás pensar pero claro ten en cuenta que hay un buen trecho...je-je ...ejem...
¿me escuchas?-
Su voz fue ocupada por un silencio incómodo.Un mal presentimiento le hizo cosquillas en la nuca.Sin determinación, impulsado por algún instinto primitivo empezó a recorrer el pasillo en dirección a su cliente.Trastabilló con una caja.La recogió , en su cubierta unas letras doradas y en mayúsculas:”ARCADIA PACK, EXPERIMENTA UN MUNDO DE PLACER”.
-Dnomo-Dijo en voz alta, casi orando al cielo.
-Estoy en ello, estoy en ello-Zumbaba.
Continuó avanzando hasta agarrar a aquel tipo por un hombro.Frío, como un cubito ,saludaba a un maldito témpano de hielo.De un movimiento brusco dio la vuelta a la butaca. La realidad dejó de darle la espalda.Cruzó la mirada con unos ojos ahogados en la niebla,ahogados en el velo blanco de la muerte:los de un cadaver.Un cuerpo sin vida que continuaba apretando la mandíbula en un rictus indeciso entre el extremo placer o la extrema agonía.Su piel ahora negra se desconchaba como la de un leproso ,en ella las larvas habían horadado su hogar desde el que saludaban curiosas.
Poseído por el pánico corrió,hasta abandonar el apartamento,hasta descender las diez plantas,hasta perder el aliento y sentir que por fin aquel fétido olor dejaba de taladrarle el cráneo.
Desorientado por el mazazo del horror se arrastró hasta el centro de la plaza, hundiendo la cabeza entre las manos, escondiéndose en el pequeño bunquer de cordura que aún se tenia en pie en su interior.
-Fred, Fred,reacciona!Me escuchas Fred?-Vocalizaba Dnomo en su cabeza.
Freddy se irguió para ver a lo lejos algo extraño.Una tienda de enormes proporciones, un letrero de neón rosa zumbante en cada intermitencia.Un efecto hipnótico le atrapó.No podía evitar
dar un paso tras otro, acercarse cada vez más hasta que la luz rosada le tintó la cara y pudo leer:
“ARCADIA STORE: AQUI EMPIEZA EL VIAJE”
-No entres-Le ordenó Dnomo.
-Respuestas, veo respuestas-
-Algo me dice que es un error, vámonos, enciende la nave ponla a máxima potencia y larguémonos ya de aquí-Le imploró.
-Algo,algo te lo dice...ahora me vienes con esas?tu?don “pobres humanos yo me rijo por la lógica”, venga no me jodas.Vamos a entrar-
-Haz lo que te de la gana-Se rindió Dnomo.
Una vez dentro de nuevo aquel olor, esas manos invisibles que te apretaban el cuello intentando estrangularte.Freddy dio un paso atrás reculando ante el ataque.Reunió el coraje necesario para recuperarse y continuar avanzando.Una nube negra le atacó, las moscas volaban de un lado para el otro, arriba y abajo, se enredaban en él hasta que, a manotazos,consiguió espantarlas.Aquel sitio estaba fraccionado en cabinas individuales. Entró en una y salió de ella con la cara desordenada por el miedo. Luego comprobó la de al lado , la de al lado de la de al lado, la de al lado de la de al lado de al de al lado, a la carrera , imbuido por la locura, resbalando y cayendo, volviéndose a levantar, parándose finalmente frente a la ultima puerta.
-Alguien, tiene que quedar alguien-
Entró.Esta vez no halló cadáveres con un aparato en la cabeza, sólo un paquete.Una caja blanca que conservaba el plástico de embalar.Un pack arcadia listo y por estrenar, la forma física del gran signo de interrogación que le obsesionaba.
-Que eres?-Preguntó mientras lo alzaba entre las manos.
-Eso no te va a responder, pero yo si-Le contestó Dnomo.
-¿Has acabado la búsqueda?Dime que has encontrado algo, dímelo!-Exigió Freddy lleno de júbilo.
-Lo he encontrado, lo he encontrado-Continuó Dnomo con aires de suficiencia-No hay de que preocuparse sólo es un juguete.
-Es un juguete?Sólo es un juguete!-Sonrió Freddy sintiendo que toneladas de peso se desprendían de su cuerpo.
-Exacto es un entretenimiento, un juego virtual ,un pasatiempo inofensivo-Rió Dnomo contagiado de felicidad.-Tantos quebraderos de cabeza cuando la respuesta estaba delante de nuestras narices.-Continuó.
-Delante de nuestras narices?Como?Que quieres decir?-
-De nuestro anterior viaje a la tierra Fred!-
-¿ De la tierra?-Preguntó Freddy frunciendo el ceño.
- Lo llevamos allá, transportamos el prototipo experimental desde la base industrial lunar,
no lo recuerdas?-

-Nosotros llevamos esta cosa a la tierra?-
-Si Fred claro, justo antes de venir a Montag, cuando va a ser sino?- Contestó algo harto de la lentitud de su huesped.
-Nosotros llevamos esta cosa a la tierra-Repitió Freddy en voz baja para sí.
La imaginación se apoderó de él. Vio a sus padres con un casco rosa en la cabeza, a sus hermanos, a sus amigos, a todo el pueblo de Bangor, a la totalidad del estado de Maine, a todos los habitantes América y luego a los del mundo.Notó que le flaqueaban las piernas, que la conciencia le abandonaba, que la delgada línea que lindaba con la locura se diluía.
-¿Te das cuenta de lo que hemos hecho?-Dijo Freddy.
-Que?-preguntó Dnomo preocupado por el cambio de humor de su compañero.
-Tienes idea de lo que dejamos en la tierra?De lo que hicimos?-
-A que te refieres?-
-A que he asesinado a mi familia, a toda mi especie!Los he extinguido, la tierra es ahora un cementerio-
-Pero que dices Arcadia sólo es un juego.-Le corrigió Dnomo.
-Un juego,sólo es un juego, sólo es un juego, sólo es un juego, un juguete no?Un puto juego!La gente muere cuando lo usa ,acaso estas ciego?Esa cosa te engancha y no te suelta hasta que te consume el alma hasta que hasta que...- Y Freddy rompió a llorar a lágrima viva.
-Extinguidos...los humanos extinguidos...-Se decía Dnomo ante tal revelación.-Siento decirte que no me sorprende en absoluto.Piensalo bien, viajáis en naves espaciales, usáis computadoras, pero en el fondo que soys?-Reflexionaba.
-¿Que somos?- Se extrañó Freddy entre sollozos.
-Que soys Fred, que soys... animales, sólo animales. Necesitáis comer, beber y por lo tanto miccionar y defecar, no sólo debéis copular sino que además os obsesiona.Soys instinto Fred, puro instinto animal.Y que es el instinto Fred?-
-Que es el instinto,que es...?-Balbuceaba Freddy con la voz agrietada por el dolor.
-Pues yo te lo diré, el instinto es error, es ilógica es un cúmulo de fallos, la acción sin premeditación sólo tosca precipitación, el instinto solo lleva a una cosa Fred. Sabes a que?-
-El instinto... a que, a que conduce..?-Se preguntaba semiinconsciente.
-El instinto lleva a la extinción, a la extinción de una especie.-Sentenció Dnomo satisfecho de haber compartido sus mas profundas reflexiones con un pobre humano.
Freddy se desplomó sobre la butaca de la habitación.Se quedó mirando al techo unos segundos notando como el ácido de la culpa le corroía los huesos.De golpe tuvo una revelación, abrió los ojos como platos para decir:
“Dnomo siempre tienes razón”.
Agarró de nuevo el paquete, lo despellejó de su funda de plástico.Corrió hacia un lado el protector de poliexpán que cedió en un susurro.Extrajo el casco rosa y lo activó.
-Que se supone que haces?-Preguntó Dnomo.
Con lentitud, recreándose en el tiempo lo colocó sobre su cabeza.
-Para!,déjalo!,te has vuelto loco?-Imploró.
Las imágenes empezaron a fluir.Sus ojos se emanciparon de sus órbitas Su mandíbula se volvió acero.Sus labios se entreabrieron mientras unos hilos de baba blanca intentaban cerrarlos de nuevo.De las profundidades de su garganta, de lo más hondo de su interior salió un sólo sonido:
-Arcadia...Arcadia...Arcadia...-
(Joan Tort telf 615303387 (antologia))

1 comentario:

Anónimo dijo...

El relato es un poco largo. Me gusta, tienes imaginación, además puedo visualizar facilmente lo que está pasando. Aunque la historia no me ha quedado muy clara, ¿qué es lo que quieres decir con ella?

Qué - con acento si es interrogativo.

Puntuación: palabra - punto - espacio - palabra

¿Tú? - con acento

Signos de interrogación y exclamación al principio y final de una frase